Sabemos que escoger el modelo adecuado de moldura para nuestra casa puede resultar abrumador así que, para que no te confundas, te contamos todos los secretos.

Las molduras en paredes y techos, en general, se asocian a interiores de vivienda clásicos, aunque cada vez son más los arquitectos e interioristas que las incluyen en sus proyectos. Si tienes ganas de añadirlas en tu casa, pero no sabes qué modelo elegir, te contamos a continuación todo lo que necesitas saber sobre ellas:

¿Qué son y cuál es el origen de las molduras?

Resumiendo mucho, las molduras son perfiles con diferentes formas más o menos complejas, que mantienen la sección constante en toda su longitud.

Si quieres saber más:

El origen de las mismas se encuentra principalmente en la arquitectura griega, donde se utilizaban diseños sencillos con fines puramente ornamentales. Después, los arquitectos romanos las popularizaron por el sur de Europa para que, posteriormente durante el Renacimiento, se recuperaran de nuevo al estudiar los restos antiguos. Sin embargo, es de Borromini de quien beben los diseños más elaborados que se popularizaron en los siglos XVII y XVIII, y que hoy todavía podemos encontrar en algunos edificios.

Cómo elegir tus molduras en casa sin miedo a confundirte

MOLDURAS TIPO 1: CORNISAS

Las cornisas son las molduras más comunes en nuestros hogares. Se utilizan para ocultar y mejorar la unión entre paredes y techos, y lo habitual es que su forma sea curva para suavizar la esquina superior de la habitación, aunque en el mercado también existen numerosas versiones con ángulos rectos. A continuación te contamos nuestros trucos para acertar al elegirlas:

A. Lado a = Lado b. Se trata de nuestra opción todoterreno. Tiene una proporción que siempre queda bien, con la que no te vas a confundir, pues resulta apta para todas las situaciones siempre y cuando su tamaño sea proporcional al de la habitación en la que se va a colocar.

B. Lado a > Lado b. Al tratarse de una moldura horizontal, la utilizamos en habitaciones grandes ya que ocupa una franja de techo más amplia de lo normal. No la aconsejamos en espacios pequeños porque los techos pueden sentirse apretados. También es una buena opción para habitaciones con poca altura libre, puesto que baja muy poco hacia el suelo, y nos ayuda a evitar el efecto paredes bajas.

C. Lado a < Lado b. Al contrario que la anterior, este modelo es muy vertical y, por tanto, perfecto para espacios altos. Funciona bien también en habitaciones con techos pequeños, como pasillos, ya que apenas ocupa espacio horizontal.

SELECCIÓN DE CORNISAS

MOLDURAS TIPO 2: ZÓCALOS

Se utilizan, al igual que los rodapiés, para ocultar y mejorar la unión entre paredes y suelos, además de proteger las primeras ya que cuentan con una altura mayor. Su uso es común en espacios estrechos para evitar roces, pero también se emplean en estancias más grandes como elementos decorativos. Al igual que con las cornisas, en los zócalos lo importante para que luzcan es elegir la proporción correcta, que dependerá de la altura de la habitación. Nosotros los diseñamos así:

A. Hasta la mitad. Una opción común es que el zócalo llegue justo hasta la mitad de la pared, calculándola dividiendo entre dos la distancia que queda entre el suelo y la parte baja de la moldura. Sin embargo, esta no es nuestra opción favorita. Preferimos que los zócalos queden más bajos para que las paredes respiren.

B. Zócalos bajos. Para acertar con la altura adecuada dividimos el alto total de la pared en 5 partes (desde el suelo hasta la parte baja de la moldura), y ocupamos con el zócalo solo una de las partes.

C. Zócalos altos. En este caso también dividimos la pared en 5 partes, pero en lugar de quedarnos con una, ocupamos dos. Al elegir un número impar nunca llegamos hasta el centro, nos quedamos siempre por debajo. Truco: Si la altura del espacio es muy exagerada también puedes probar a dividir entre 7 y ocupar tres partes.

Con este sistema de divisiones la altura de los zócalos siempre se percibirá proporcionada con los espacios. Ahora te toca a ti ponerlo en práctica, aunque ya sabes que una vez que se conocen las reglas, estas pueden saltarse ;)

SELECCIÓN DE ZÓCALOS