Consejos para amueblar una casa pequeña
Amueblar un espacio pequeño es un reto, pero con nuestros 6 consejos, a partir de ahora te resultará mucho más fácil.
Este post es una colaboración de Himera Estudio con Portobello Street.
Vía Gubi
1 Cuida la escala de tus muebles
Una casa pequeña no debe tener muebles pequeños. No. Una casa, sea cual sea su tamaño, debe resultar práctica y cómoda, por eso nuestro primer consejo es que, en lugar de reducir las dimensiones de tus muebles, reduzcas su número. Es mejor que tengas menos cosas, pero de tamaño normal, a que elijas mobiliario diminuto. La escala adecuada de los muebles es fundamental en una casa. Y lo mismo sucede con los complementos (un claro ejemplo de ello son las alfombras).
Los muebles pequeños pueden incluso crear la sensación de que una casa es todavía más pequeña y distorsionar la percepción de su escala. En nuestros proyectos, cuando nos enfrentamos a habitaciones de dimensiones reducidas, siempre procuramos incluir menos elementos, pero bien elegidos. Que el espacio respire porque hay pocas cosas, no porque estas sean pequeñas :)
Somos conscientes de que amueblar una casa pequeña supone todo un reto, pero si creas un listado de prioridades y compras solo los elementos fundamentales, estarás en el buen camino.
Alfombras en casa: tamaño adecuado para cada habitación
2 Coloca espejos en lugares estratégicos
Los espejos tienen el poder de multiplicar la luz y hacer que los espacios parezcan más grandes. Si quieres aprovechar todas sus bondades, sitúalos en lugares estratégicos:
Enfrentados con ventanas para que reflejen el exterior.
Enfrentados con puertas para que, si estas están abiertas, amplifiquen el espacio.
Busca para ellos lugares con suficiente espacio delante para que puedan cumplir bien con su función. Evita ponerlos, por ejemplo, en los laterales de un pasillo. No porque vayan a quedar mal, sino porque en lugares estrechos su reflejo no aportará ningún extra a tu casa y no aprovecharás todo su potencial.
Repetimos e insistimos en lo que ya te contamos en el punto anterior: mejor uno grande, que respire, que varios pequeños. Un espejo protagonista encima de la cama o del sofá es un acierto seguro. Pero si tienes dudas, recuerda: es tan importante su posición como lo que refleja.
NUESTRA SELECCIÓN
3 Abusa de los colores claros y neutros
Esto ya lo sabrás: los colores claros ayudan a que los espacios parezcan más grandes. No tengas miedo a abusar de ellos en muebles, paredes y complementos. Las tonalidades neutras son las que mejor aguantan el paso tiempo (es más difíciles que te canses de ellos) y resultan muy fáciles de combinar con cualquier tono de resalte.
Crea un lienzo en blanco sobre el que trabajar, para que tu casa resulte luminosa. Sobre ese lienzo (paredes y techos) añade grandes piezas de mobiliario claras también y después, para crear contraste y que el espacio vibre, elige complementos en tonos más saturados (maderas, negros, tierras…). De esta forma nunca te confundirás.
Vía Vincent Van Duysen
4 Elige piezas de mobiliario ligeras (con patas)
Un truco sencillo para que el espacio no se perciba recargado es utilizar muebles que no toquen el suelo. Si este queda a la vista bajo los muebles, la habitación se verá más grande pues no taparemos “sus límites”. Cuando colocamos por ejemplo una cómoda contra la pared, el espacio que ocupa de suelo, en nuestra cabeza, lo restamos inconscientemente de la habitación. Sin embargo, si la cómoda tiene patas y bajo ella podemos ver el encuentro del suelo con la pared, inevitablemente el espacio se ampliará. ¿Lo habías pensado alguna vez?
Ello no quiere decir que, si tu casa es pequeña, absolutamente todos tus muebles deban tener patas. Aquellas piezas grandes como camas y sofás que, aun con patas, no nos dejan percibir el suelo en su totalidad (dada su profundidad), pueden llegar hasta abajo. Para contrarrestar su peso visual, combínalas con elementos más ligeros: mesillas de noche, mesas auxiliares o, como ya dijimos, una cómoda o aparador con patas.
Vía Norm Architects
NUESTRA SELECCIÓN
5 Pocos cuadros pero grandes
Al igual que sucede con los espejos, en casas pequeñas es mejor que elijas menos cuadros pero más grandes. Al dejar las paredes libres, la sensación de amplitud será mayor.
Una pared repleta de cuadros diminutos genera más agobio y parece más pequeña que una pared con un único cuadro grande. Si este además es de colores claros o muestra un paisaje con horizonte lejano, ayudará a que la habitación parezca más espaciosa.
Otro truco que también funciona en casas pequeñas es que sitúes los cuadros más cerca de los muebles que del techo. De esta forma, la altura de la habitación parecerá mayor. Esto puedes aplicarlo con cuadros sobre sofás, en rincones de lectura o sobre cómodas. Pruébalo y nos cuentas ;)
Vía Evelyn Moreels
Vía Evelyn Moreels
6 No ocupes el centro del espacio
Para que una habitación, ya sea un dormitorio, una cocina o un salón, parezca más grande, debe estar lo más despejada posible. Y una buena forma de conseguirlo es liberando su centro. Al evitar muebles en ese punto, las circulaciones serán más fluidas y el espacio parecerá más libre.
Este punto se puede entender muy fácilmente en un salón, donde tendemos a colocar sí o sí mesas bajas delante del sofá. Si tu estar es estrecho, o funciona como lugar de paso, te aconsejamos que utilices una mesa de apoyo lateral en lugar de centrada para que no interrumpa. Si además es ligera, podrás moverla siempre que la necesites más centrada.
¿Vives en una casa pequeña? ¿Cuáles han sido los trucos que mejor te han funcionado?
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